Raúl, montado en su bicicleta, se dirigía a buscar a su amiga Claudia que vivía a las afueras de la ciudad.
Llevaba apuntada su dirección en la palma de la mano, pero la energía con la que pedaleaba hizo que el sudor le borrara las letras.Este contratiempo no le importaba ya que sabía que debía dirigirse a la calle Galerías y allí podría preguntar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.